Eras temor de las tardes,
olvido de sensaciones mortecinas,
fuiste el rey en república ajada,
sigues siendo todavía,
heredero de la desgana.
Maullabas bramidos desangelados,
demandando caricias y alimento.
Pedías y mirabas con esos ojos,
llenos de cariño y espanto.
inmortal eres en el recuerdo de aquellos,
a quién sin conocer diste aprecio.
Te agarraban,te cogían,te hacían mil perrerías,
pero en fin,todos sabíamos,
que a ti nunca te importaría.
Desapareciste una noche,
como león que sabe que llega su final.
No quisiste hacer sufrir a quienes te esperaban,
y caíste en sueño profundo,
del qué aún esperamos que puedas despertar.
CASCABEL "CASKI" IN MEMORIAM
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