Son claves de sutura las que me ciñen,
y se enredan bajo mi cabeza.
Son soledades adquiridas,
a fuerza de vergüenzas e injusticias.
Se me niegan diversiones,
de besos absurdos y de colores;
pero no pienso abandonarme en cenagales,
y voy a salir a la calle,
a entregar ilusiones contrariadas,
a caballeros medievales,
y a doncellas encorsetadas.
Mientras el viento arrie mi cabello,
y fortifique una ducha,lo qué con mi vestir no arreglo,
volveré de nuevo a sentir la brisa marina,
y pondré a secar mi amor con espinas.
Cerraré mis puertas del tiempo,
a sociedades agrietadas de espanto.
Retraeré mi negatividad adquirida,
y propondré al suicidio una tregua suicida.
Volveré a cargar el piélago a mis espaldas,
y haré renacer flores extinguidas por la sinrazón.
Piscinazo sentimental el qué me absorve,
pués llevo cierto tiempo esperando qué alberguen agua sus fondos,
espero a qué caiga un dilúvio universal,
en el qué la importancia,no importe,
la desgana no gane,
y encontremos el motivo qué nos haga capaz de amar.
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